Vendedor Humilla A Anciano, Pero Luego Se Da Cuenta De Quién Es

Para Más Inri

reputation.com

Advertisements

En ese momento, entraron una mujer y una niña. Ella le dio a Robert un amplio margen al pasar por la puerta, como si quisiera evitar acercarse a él. 

Como si eso no fuera suficiente, se inclinó y fingió susurrarle algo a su hija: “Por eso tienes que seguir en la escuela. Si no, acabarás pobre y sucia como él”. Todo el piso estalló en carcajadas.

Advertisements
Subscribe
Notify of
guest
0 Comments
Most Voted
Newest Oldest
Inline Feedbacks
View all comments