No Sabían Con Quién Estaban Tratando
La trataron como a una loca. Aquella anciana les había hecho conducir desde comisaría para lo que parecían ser sólo delirios.
Advertisements
Se sonreían y se miraban unos a otros, burlándose de la desesperada mujer. Pero, de repente, uno de los agentes vio algo que le obligó a preguntarle quién era su hijo. Cuando la mujer dijo ese nombre, todos los agentes se pusieron pálidos: habían cometido uno de los mayores errores de su carrera.
Advertisements