Ataque Cardíaco Repentino
Pixabay
Advertisements
El corazón de Mini se aceleró. Sus pulmones parecían no poder recuperarse. Hacía tiempo que no recibía una descarga así.
“¿Qué está pasando?”, preguntó su marido, mirando al pez. Minni se tranquilizó y extendió lentamente la mano. Señaló al pez. “¿Cómo es posible?”, gritó.
Advertisements
