Confrontación
The Mirror
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El chico se agarró al manillar del autobús y se puso firme. “¿Crees que te mereces este asiento sólo por ser madre?”, le espetó.
El chico llevaba unos vaqueros, una sudadera oscura con capucha y unas deportivas gruesas. Thomas podía ver que era un chico un poco chulo. Todavía tenía un auricular en la oreja.
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